México ha sido tierra de grandes deportistas en el mundo del atletismo. Entre las destacadas figuras mexicanas en este deporte y en particular en el maratón está Germán Silva, dos veces ganador del Maratón de Nueva York. Hoy en día está dedicado al coaching y es uno de los involucrados en la primera carrera del medio financiero en Ciudad de México: el Fun, finance and running que se realizará en el sector de Santa Fé el próximo domingo 01 de septiembre de 2019.

El maratonista mexicano, nacido el 9 de enero de 1968 en Zacatlán, Puebla, se mudó desde pequeño junto con su familia a Tecomate, Veracruz, donde tuvo sus inicios en el atletismo. Silva comenzó a correr muy joven, cuando cerca de su casa vio pasar a dos corredores. Acto seguido, quedó cautivado con aquello así que comenzó a correr como un juego. Durante los Juegos Olímpicos de Los Ángeles (EEUU) en 1984, Silva fue testigo, a través de la televisión, de algo que le cambió la vida: “Cuando vi que unos mexicanos ganaron medalla, escuchar el himno nacional de tu país, ver la bandera de México… me entusiasmé, me dije no sé como voy a hacer pero yo voy a estar allí, comencé a buscar información y comencé a correr y a entrenar a mi manera”, dijo Germán Silva en una entrevista concedida a Soymaratonista.com.

Silva creció en el estado de Veracruz, en el seno de una comunidad rural de muy pocos habitantes. Todos los días iba corriendo de su casa a la escuela, en la mañana y en la tarde bajo condiciones de mucho calor. «Así fui agarrando el gusto por correr, hasta que un día vi en los periódicos que había una carrera y me le escapé a mi papá porque a él no le gustaba que yo corriera, decía que eso era de locos”, expresó el mexicano.

Como predestinado para grandes hazañas, Silva fue ganador en aquella competencia pero dijeron que había hecho trampa y no le dieron el premio; apenas tenía 16 años. Los organizadores no creyeron en él cuando dijo que no había realizado un entrenamiento formal para la carrera. Para respaldar los comentarios, el diario local añadió además que Silva cruzó la meta “fresco como una lechuga”. No tenían idea de que el entrenamiento del joven lo hacía a diario corriendo desde su casa hasta la escuela, ida y vuelta. Fue aquella su primera incursión formal en el mundo del atletismo.

Para demostrar que sí podía correr rápido asistió a una media maratón unos días después de aquella primera competencia. Se trataba de una prueba exigente para alguien de su edad. Sin embargo, logró llevar el ritmo, manteniéndose en el primer lugar hasta el kilómetro 10. “Una persona de aquella localidad que tenía la curiosidad de ver si ese joven de Tecomate podía correr, fue a verme en aquella carrera”. Para asombro de todos, Silva no sólo mantuvo el ritmo, sino que estuve al frente junto a los primeros hasta los primeros 10 kilómetros de la distancia. Esta persona mandó a llamarle al terminar la competencia: Resultó ser dueño de un diario local, y además de un club de corredores. “Luego de la carrera me mandaron a traer a su oficina, yo estaba muy nervioso porque pensé ‘Si hace 8 días salí yo en el periódico que era yo un tramposo, qué pasarará ahora’. Aquel hombre llamó al reportero, y le dijo: ‘porque andas escribiendo tonterías, este chico realmente corre, y ahora te vas a disculpar, allí comenzó mi historia, me invitó a su club de corredores”.

La frase: El talento no significa nada si no inviertes horas de práctica. 

Con el sueño de participar en unos Juego Olímpicos, Silva comenzó a entrenarse en pistas mientras hacía las carreras de ruta para ganar ingresos que le permitieran cubrir sus gastos. Las primeras carreras de asfalto fueron en México. Posteriormente comenzó a correr en Estados Unidos. “Fue allí donde comenzamos a ganar, a quedar entre los primeros tres lugares, y ese dinero lo reinvertíamos para poder ir mejorando los tiempos y poder participar en unos Juegos Olímpicos”.  Finalmente esa meta se concretó cuando asistió a los Juegos Olímpicos Barcelona 1992, en los que logró el 6to lugar en los 10.000 mts. En 1996 volvió a estar presente en unos Juegos Olímpicos, obteniendo el 6to lugar en el maratón de Atlanta 1996.

La sensación de representar a su país significó para Silva una experiencia maravillosa, para la cual asegura que es necesario invertir mucho tiempo: “Yo tuve que invertir diez años. Es un trabajo, es algo profesional, el talento está allí, está bien, pero el talento no significa nada si no inviertes horas de práctica”, asegura.

Entre sus logros más destacado figura el haber ganado en dos oportunidades seguidas el Maratón de Nueva York, en los años 1994 y 1995, respectivamente. A las calles neoyorquinas vuelve cada año, pero no con el interés de competir o buscar mejorar una marca.

Para Silva, hoy día dedicado a la enseñanza de corredores, entrenador, conferencista, mentor  y en la actualidad director general “ German Silva Coaching S.C. y Germán Silva Corre RC y Germán Silva Tours, “correr no tiene límites en temas de beneficios. No solo hay gente de 40, sino también de 60 años o más comenzando a correr. Nunca es tarde. Yo lo único que siempre les digo es que el secreto del maratón es como la carrera de la vida, y el chip que  te debes poner en la cabeza es que si eres capaz de correr un minuto, eres un maratonista potencial, lo demás es entrenar el cuerpo y la mente, dedicarle tiempo, ser paciente”.

Finanzas y running 

Como parte de la carrera Fun, Finance and Running, Silva ha dirigido las últimas semanas entrenamientos exclusivos para todos aquellos que participarán en la carrera, en las modalidades de 5,5 y 11 kilómetros, respectivamente. Para Silva el éxito está en la constancia y los cuidados que se tengan, así como de acercarse a alguien que sepa guiar.

Además, como parte del proceso preparatorio para la carrera, este jueves 29 de agosto se estará realizando una Mesa Redonda con varios invitados para hablar del impacto del running en el sector de las finanzas y cómo ha ido  ganando adeptos entre los que están vinculados a este mundo. “Cada vez la gente del medio financiero se preocupa más por cuidarse, como dice mi socio, no hay situación de presión que aguante más de 5 o 10 kilómetros”, afirma Silva. El coach y mentor también estará el sábado 31 de agosto en la entrega de materiales.

Para Silva su entrenamiento favorito es hacer algo a diario. “No importa si es la distancia más larga o la más rápida, siempre le digo a la gente que el sentido del maratón es nunca dejar de avanzar. Aunque sea el ritmo lento, o rápido, o al ritmo que sea pero nunca dejar de avanzar. Puedes caminar y puedes volver a avanzar eso es justamente lo mismo. Si tú haces algo diario, preparas al cuerpo para un maratón, ahora si sólo piensas en hacer las carreras largas de fin de semana pues acaba mucha gente por lastimarse por eso es vital un plan de entrenamiento”.

Silva ama participar en maratones, pero en los últimos años ha descubierto una nueva pasión: corre en montaña. “La calle me gusta mucho pero si me das a escoger prefiero la montaña, levantarme y salir a correr con la naturaleza es una conexión más completa, más cercana, no hay prisa, vas disfrutando los animales, vas disfrutando las plantas, vas llevando en armonía tu mente con el tema de correr, en terrenos difíciles a veces”. A la par de sus compromisos en México, Germán Silva se prepara para correr en el Maratón de Berlin el 29 de septiembre y hacer una vez más el Maratón de Nueva York este año en compañía de su hijo, una experiencia que ya compartieron en la edición del año pasado y desean volver a repetir.