Keitany va en busca de su quinto título en Nueva York en seis años. El año pasado logró la victoria en 2:22:48 para sumar un palmarés más a sus victorias en 2014, 2015 y 2016, en la carrera que cuenta con la Etiqueta de Oro de la IAAF.

Con las condiciones climáticas favorables previstas para el domingo, hay muchas posibilidades de que pueda batir el récord de 2:22:31 de Margaret Okayo en el campo. La más reciente salida de Keitany (37 años)  fue en septiembre, cuando participó en la «Gran Carrera del Norte», cuando marcó 1:07:58 para terminar cuarta. La historia ha demostrado que cuando la keniata llega a Nueva York en plena forma, es increíblemente difícil de batir. Su maratón más reciente fue en Londres en abril, cuando dejó registro de 2:20:58 para terminar quinta. 

«He entrenado bien, así que estoy lista para afrontar esta carrera», dijo Keitany el pasado jueves durante la conferencia de prensa previa a la carrera. «No digo que vaya a pasar un buen rato, pero estoy lista para defender mi título. Correré mi propia carrera», aseveró. 

En cuanto a sus victorias en Nueva York, Keitany dijo que está ansiosa por cerrar la brecha con la noruega Grete Waitz, quien se mantiene como la única con nueve victorias en la carrera de la Gran Manzana. Su principal amenaza probablemente provendrá de la etíope Ruti Aga, que ocupa el segundo puesto entre las marcas más rápidas de la carrera con 2:18:34.

Ruti Aga, de 25 años, fue la sorpresa en el maratón del Campeonato del Mundo de Doha a finales de septiembre, ya que se había inscrito en Nueva York hace varios meses, pero en condiciones de calor abandonó la competición antes de los 15 kilómetros. Terminó segunda en el Maratón de Berlín el año pasado y a principios de este año se adjudicó su primer Abbott World Marathon Major, con un tiempo de 2:20:40 en Tokio.

Una debutante intrigante es la keniana Joyciline Jepkosgei, de 25 años, que ostenta el récord mundial de media maratón a 1:04:51, que estableció en Praga en 2017. Aunque este será su primer intento a esta distancia, tiene algo de experiencia en las onduladas colinas de Central Park, pues ganó en la Media Maratón de la ciudad de Nueva York en marzo con tiempo de 1:10:06. También tuvo el gusto de formar parte de una gran maratón de la ciudad cuando actuó como pacers o marcapasos en el Maratón de Londres a principios de este año.

Es poco probable que se repita el triunfo de Estados Unidos que vimos en 2017, cuando Shalane Flanagan superó a Keitany en las últimas millas a través de Central Park, pero Sara Hall y Desiree Linden parecen tener la mejor oportunidad de subir al podio por los locales. Hall marcó un gran tiempo de 2:22:16 en Berlín en septiembre, mientras que Linden, campeona del Maratón de Boston del año pasado, es un atleta consistente de clase mundial que rara vez hace una mala carrera.

La australina Sinead Diver es otro digna de gran respeto. La atleta de origen irlandés batió su mejor marca personal en Londres a principios de año con un tiempo de 2:24:11 y demostró que sus preparativos han ido bien con un tiempo de 25 segundos en la final mundial de 10.000 metros disputada en Doha hace cinco semanas, en la que terminó en el puesto 14ª.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_single_image image=»52243″ img_size=»large»][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]La carrera masculina se presenta muy abierta, con el etíope Lelisa Desisa intentando completar un rápido doblete a lo largo de la distancia, tras haber conseguido el oro en el maratón del Campeonato del Mundo de Doha hace tan sólo cuatro semanas.

El corredor, de 29 años de edad, tiene una marca personal de 2:04:45 que se remonta a 2013, y aunque eso puede no ser lo mejor dentro del mundo de las carreras de larga distancia en la actualidad, en especial en carreras como éstas, -con un recorrido con colinas y sin marcapasos- Desisa es un corredor formidable. Marcó 2:05:59 para ganar en Nueva York el año pasado y en abril terminó segundo en el Maratón de Boston, a sólo dos segundos del ganador Lawrence Cherono.

«Después de Doha, traté de hacer un entrenamiento de recuperación», dijo Desisa. «La maratón no es fácil, pero dije que vería cómo estaba mi cuerpo y si estaba bien. Ganar Nueva York antes cambió mi vida, cambió mi futuro. No sé qué pasará, pero haré lo que pueda», aseguró. 

Geoffrey Kamworor, el campeón de 2017, también está de vuelta y el keniata estará ansioso por conseguir algo mejor que su subcampeonato del año pasado. Llega después de una preparación impresionante, tras haber establecido el récord mundial de media maratón en 58:01 en Copenhague en septiembre.

El jueves confirmó que los preparativos fueron bien en su base de Kaptagat, donde ha estado entrenando junto a su amigo y mentor Eliud Kipchoge. «Hice lo que normalmente hago para correr una maratón», dijo. «Creo que estoy listo», afirmó. 

Shura Kitata, de Etiopía, parece estar preparado para lograr la victoria en una maratón mayor, y esto puede representar una oportunidad ideal para el joven de 23 años, que tiene un mejor registro de 2:04:49. Tamirat Tola es otro de los que no se puede descartar, un cuarto clasificado el año pasado que terminó sexto en Londres en mayo, con un tiempo de 2:06:57. Marcó 59:13 para la media maratón y terminó segundo detrás de Mo Farah en la carrera Great North Run en septiembre.

Los atletas estadounidenses Abdi Abdirahman y Jared Ward lideran el grupo de corredores locales,  mientras que el alemán Arne Gabius y el atleta holandés Michel Butter liderarán el ataque europeo. Los socios Brett Robinson y Jack Rayner enarbolarán la bandera de Australia.

Fuente: Texto original de la IAAF

Fotos: IAAF(Getty Images) © Copywrigh

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